Oración para que me paguen lo que me deben
Compartimos contigo una potente oración diseñada para recibir el pago de deudas, dinero que te deban o viceversa. Se trata de una reclamo espiritual que lo que viene a hacer, es concentrar toda la energía de esa necesidad imperiosa de cobrar el dinero debido y proyectarla al universo para que canalice hacia ti, todas las posibilidades de cobrar ya ese dinero.
Oración para que me paguen lo que me deben
Dios misericordioso, te ruego que pronto se me pague lo que me deben. He esperado pacientemente, pero ya no puedo esperar más.
Entiendo las necesidades de todos, pero te imploro que consideres mi situación y me ayudes a recibir lo que se me debe de manera justa y rápida.
Eres un Padre compasivo, conoces mi urgencia por ese dinero. Te pido, por tu amor y por las buenas acciones que he realizado, que intercedas en esta situación para que se me pague lo que es justo.
Coloca en el corazón de la persona deudora el deseo de cumplir con su obligación y no permitas más engaños ni mentiras. Solo tú puedes liberarme de esta situación, por favor, ayúdame.
Con tu gracia y amor, responde a esta oración y permite que se cumpla lo adeudado de manera justa y rápida. Que la persona reconozca mi buen corazón y cumpla con su deuda prontamente.
Asísteme en esta deuda y permite que se me pague lo que me deben. Confiando en tu fidelidad, te ruego por tu ayuda y misericordia.
Te lo pido en tu nombre, amén.
Datos de interés en esta situación
Además de practicar el rezo de esta oración, es muy importante que analices bien tu vida para determinar si se están generando energías negativas que sabotean su propia prosperidad. Mantener una actitud negativa constante puede llevar a situaciones desfavorables, como la pérdida de dinero. Es totalmente necesario mantener actitudes positivas hacia la vida. Si algo no funciona hoy, visualiza que mañana se resolverá. Si el deudor no pagó hoy, ten la certeza de que lo hará mañana.
A pesar de que para realizar esta oración puede realizarse en cuantas veces quieras y en cualquier momento del día, nosotras siempre aconsejamos los momentos del Ángelus: a las seis de la mañana, al mediodía y a las seis de la tarde.